
Ya sé lo que estás pensando… De todas las fases de los ciclos de cambio que vamos experimentando a lo largo de nuestra existencia, ésta es la que menos apreciamos. Y te entiendo, claro… ¿a quién le gusta andar por la vida experimentando dolor y sufrimiento, sintiéndose triste y atrapado, sintiéndose solo, abandonado, inseguro, atormentado, angustiado y, para colmo, sin una pizca de esperanza de que todo esto se acabe un día? Es más, no es muy alentador ver como muchas personas detuvieron sus pasos en un eterno Otoño o un interminable Invierno y observar cómo ahí se quedan, años tras años, décadas tras décadas, convencidas además de que No hay de otra, de que Así es la vida, de que Esto fue lo que les tocó, de que son víctimas de las circunstancias o de los demás… o de ambas cosas.
Pero ni tú ni yo queremos esto: por eso soy Coach y por eso lees este blog… porque lo nuestro es abrazar la vida y procurar gobernar nuestro barco, incluso por mal tiempo ¿Me equivoco? Y no, no es fácil. Y sí, tienes muy buenos motivos para encontrarte en esta situación: algo pasó, algo muy doloroso, lo sé. Pero ya pasó. Ya pasó. Se acabó. Esto fue ayer y no hay marcha atrás. Simplemente no la hay.
Así que ahora, ¡Andando! ¡Tienes mucho que hacer!
El Dr Hudson, autor del modelo (1) del cual me estoy inspirando a la hora de redactar esta serie de artículos, llama esta fase “Cocooning” porque es una periodo durante el cual tendemos a aislarnos, a buscar la soledad, la intimidad, la seguridad de la llamada Zona de Confort. Y ¿sabes qué? Está muy bien así porque definitivamente, hay un tiempo para todo y en Invierno, lo mejor es retirarse en el calor protector y reconfortante del hogar.
… pero durante un tiempo, solamente un tiempo, justo el necesario para acondicionar tu nido a tu gusto y de esta manera retomar fuerzas, recobrar confianza y resucitar tus ganas de emprender de nuevo tu viaje. Porque lo que tú sabes (y que desgraciadamente muchas personas ignoran) es que el Invierno es en realidad el momento perfecto para iniciar un gran proceso de transición y transformación profunda. Lo que tú sabes (y que desgraciadamente muchas personas prefieren ignorar) es que que si tomas las riendas de tu existencia y te comprometes contigo mismo/a a hacer lo necesario durante esta fase que te toca vivir ahora, vas a lograr activar un amplio y fascinante proceso de cambio que te va a llevar a una nueva realidad mucho más acorde a tu identidad profunda y por lo tanto mucho más placentera, alegre y feliz.
¿Qué actividades puedes implementar para favorecer esta Transición de Vida y llegar a la fase siguiente (Primavera)?
-
- Como siempre, es fundamental atender primero que nada tus necesidades básicas: descanso, alimentación, relajación, oxigenación, ejercicio… todo lo que sea necesario para que recobres tus fuerzas y tu confianza en ti mismo/a.
-
- Si te es posible, toma un año sabático o trabaja a medio-tiempo. De cualquier manera, trabaja en organizar tu tiempo con el objetivo de priorizar lo que te da gusto, te hace sentir bien, te motiva y te llena.
-
- Dedica un poco de tiempo a tu nido, tu hogar: mientras te estás reponiendo, puede ser una gran fuente de energía, equilibrio y bienestar pero siempre y cuando te aseguras de que refleja tus gustos y tu sensibilidad (2).
-
- Toma el tiempo de cerrar ciclos: hay muchas herramientas que te pueden ayudar a hacerlo y te compartiré unas cuantas. No dudes por otra parte en marcar este cierre con algún ritual o rito: dependiendo de tus creencias o practicas espirituales, puedes por supuesto acudir a algún ritual ya existente pero igual lo puedes inventar con tu propia simbología. Lo importante es que tenga significado para ti y te permita por lo tanto conectarte con el sentido profundo del acto que estás llevando a cabo.
-
- Cada vez que puedes, vete de fin de semana o de viaje para cortar con la rutina y distanciarte un rato de tus circunstancias actuales.
-
- En cuanto te sientes más fuerte, procura viajar o hacer una estancia en un país extranjero cuya cultura es muy diferente a la tuya: es hora de ver la vida (y tu vida en particular) desde otra perspectiva…
- … e iniciar tu viaje interior: terapia si necesario, coaching por supuesto, meditación, escritura (diario, poesía), lectura (novelas, cuentos, filosofía, psicología y desarrollo personal, etc), pintura, música, espiritualidad… cualquier actividad que te permita conocerte y crecer.
Todas estas actividades (entre otras) te van a permitir contestar a esta gran pregunta: ¿quién soy yo? y llevarte poco a poco hasta el punto de no retorno a partir del cual vas a operar esa transición tan anhelada hacia tu nueva vida. ¿Quién soy yo? ¿Qué es lo que me hace sentir feliz? ¿Qué es lo que me hace sentir pleno/a? ¿Qué es lo que le da sentido a mi vida? ¿Qué es lo más importante para mi? ¿Cuáles son mis valores? ¿Quién quiero ser dentro de cinco años? ¿dentro de 10 años? ¿Cuáles son mis habilidades, mis recursos, mis talentos?¿Cuáles son mis sueños? ¿Cuáles son mis retos? ¿Qué desafíos estoy dispuesto/a a enfrentar? ¿Qué legado quiero dejar?
En el calor protector de tu nido, de tu capullo (cocoon), vas aprendiendo a conocerte, poco a poco, quitando lo superfluo, lo simulado, lo impuesto por las circunstancias, la educación, la cultura… Y ¿qué crees? ¡Te estás cayendo bastante bien! Además, vas descubriéndote muchos talentos, muchas habilidades. Te vas dando cuenta de que tienes a la mano un sinfín de recursos internos para no solamente salir adelante sino también y sobre todo para diseñar tu futuro, tomar el mando y crear una vida totalmente a tu medida.
Al darte cuenta de todo esto, tu autoestima y confianza en ti mismo/a crecen de manera exponencial. El miedo y el enojo se desvanecen, la tristeza desaparece y ya no te sientes atrapado/a. Al contrario, tu vida ha adquirido un nuevo propósito: empiezas a hacer planes, a tener proyectos. Definitivamente tienes mucho que hacer de ahora en adelante y no dudas ni un segundo de que lo vas a hacer, y con éxito.
Ya estás listo/a para abandonar esta fase y entrar en la siguiente. ¡Felicidades! Hiciste un gran trabajo.
__________________
(1) Frederic M. Hudson, Ph.D, The Handbook of Coaching, San Francisco, Jossey-Bass, 1999, p. 105-114.
(2) El artículo titulado ¡A disfrutar con los 5 sentidos! puede ser de ayuda para ti.
0 Comentarios
·Deja un comentario